[color="#000080"]6. FINALES DE NOVIEMBRE, 1756[/color]
Finalmente las tropas de vanguardia prusianas que habían llegado a Praga, se encuentran a pocos días de marcha de Dresden, donde pasarán el invierno a refugio y preparando la que se espera, sea una durísima campaña durante 1757. Por el contra, las tropas de Braunschweig, salen en dirección Chemnitz, donde la pequeña fuerza austríaca sigue con el asedio de esa ciudad. Carente de cualquier importancia estratégica por sí misma, es no obstante una puerta de acceso a Leipzig y hacia el corazón de la recientemente sometida Sajonia, por tanto es algo que debe ser eliminado de inmediato.
En cuanto a Silesia, ha llegado el momento del contraataque, al ver al único cuerpo de Browne que sigue en Ohlau, las dos columnas del ejército de Silesia salen con orden de atacar al enemigo, y si es posible, volver a asentarse en Schweidnitz. Se presenta a la vista, pues, el primer combate de cierta entidad que habrá en esta guerra.
En cuanto a las opciones militares, tratamos de conseguir 3 reemplazos de infantería regular prusiana, no hay que olvidar que se avecina un combate y que además la inmensa mayoría de unidades de infantería prusianas (tanto regulares como de élite) están por debajo del máximo de elementos que pueden albergar (sobretodo están en 4 sobre 5).
Estas opciones militares se consiguen a base de los puntos de compromiso que se van obteniendo cada turno (y en ocasiones se ganan o se pierden por evento), más recursos, que al igual que en otros juegos de AGEOD son reclutas, material de guerra y dinero. Esto viene en la barrita de la parte superior de la pantalla.
Salen por orden: puntos de victoria, moral nacional, puntos de compromiso, dinero, reclutas y material de guerra. Hay que decir que para Prusia, a partir prácticamente de 1757 el material de guerra y el dinero no será problema, ya que conseguimos fuertes subsidios británicos desde el inicio casi de la partida. En cambio los reclutas, ése ya es otro asunto.
Una noticia que afecta negativamente es que el Duque de Newcastle dimite, de manera que William Pitt (el Viejo) y el Duque de Devonshire, se las tienen que arreglar para formar un nuevo gobierno en Gran Bretaña. Todo ello se traduce en pérdida de puntos de compromiso justo lo que se comentaba hace un momento.
Y una serie de noticias que no por menos esperadas, son menos temidas. Diversos agentes prusianos trabajando en territorio enemigo informan de que ingentes fuerzas enemigas van desplazándose desde diferentes territorios de los Habsburgo para converger en el teatro de operaciones de Bohemia, Sajonia y Silesia. El enemigo empieza a intentar hacer valer la fuerza bruta de sus números.
Y llega el momento de los combates. Daré cuenta de ellos en el turno en el que se producen, aunque el informe de los mismos aparecen, claro está, entre los mensajes que salen al inicio del turno siguiente.
Decepcionante, esa es la palabra:
Las fuerzas combinadas de en dos columnas de Silesia no han combatido juntas, no han sabido coordinarse y el resultado ha sido que únicamente Wedell ha combatido, con un cuerpo inferior en número al enemigo, mientras que las fuerzas de Schwerin han parecido contentarse con mirar el espectáculo. El resultado, un agrio combate donde hemos perdido más de 3000 hombres, y en lugar de castigar al enemigo con una fuerza el doble de grande, la cosa ha quedado en una victoria pírrica en un perfecto ejemplo de la definición de esta expresión.
Por otro lado Braunschweig, llega a Chemnitz y propina un serio correccional a la débil fuerza austríaca que asediaba la ciudad, la cual debe retirarse inmediatamente. Aun así, la amargura producida por la batalla de Ohlau sigue persistiendo.
